Mira.
Más de 8 años de mi vida estuve leyendo miles de libros en la biblioteca de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires. Sí, carrera entera más especialidad, más tesis… en fin. Son muchos libros que ninguna bartender como yo podría pagarse. La solución? La biblioteca de la facultad y un don que aprendí en esos años: leer y resumir.
8 años donde no se si aprendí de psicología pero si aprendí a comparar textos, investigar fuentes y hacer conexiones. Y esta es mi última conexión que no es una reflexión: es una afirmación.
Ya te avise: no hay clickbait.
La cultura cervecera no existe.
Lo que existe es la cultura y la cerveza.
Lo que existió desde siempre es la cultura, cultura que durante muchos años no se movida, era de cada zona, lugar, agrupación de gente…. sí, había nómadas que llevaban algunas ideas a otros lugares. Sí, las guerras, la “evangelización”, la conquista, la búsqueda de nuevas rutas de venta… empezaron a moverse y mezclarse culturas con el tiempo. Pero era porque persona A con una cultura se juntaba con persona B e interactuaban.
Hoy es casi inmediata esa interacción y puede ser no buscada.
Hoy prendemos la pantalla del teléfono y pum!: cultura PEPIN en nuestra manito sin ni siquiera quererlo, ni siquiera saber que es PEPIN y ni siquiera buscarlo. Todo esto con o sin una cerveza en la mano. Nuestra cultura, tu cultura va conociendo otras, va interactuando personal o impersonalmente con o sin una cerveza en la mano.
Pero no siempre fue así.
Por mucho tiempo, y no tenés que ser tan vieja, yo misma cuando era joven y audaz (jeje) para interactuar con gente tenía que ir a la fiesta del colegio de al lado. Y cuando fui mayor de edad sin duda ir al bar beber algo y hablar con humanos también servía.
Me acuerdo que mi hermana me contaba que iba a bares donde tenían teléfonos donde podías llamar a la mesa de al lado si te gustaba alguien. Y NO ES TAN VIEJA jajajaj.
Lee esto y me mata.
Real.
Volviendo: vamos un poco más atrás. Padres, abuelos… pero vamos un poco más atrás. Los bares eran un punto social, las fiestas, los bailes… las comidas, los ingredientes, las bebidas. Tenías que moverte para disfrutar algo distinto a lo que había en tu ciudad. Esa cultura que visitabas tenía mil sabores, aromas, bebidas que te enamoraban o que te desagradaban. Todo dependía claro esta.
Había una cultura que bebía un tipo de cerveza porque había mil razones (tecnología, granos, insumos, aguas, posibilidades…) que la hacían de esa forma.
Volvamos al 2019. Me acuerdo volver a Buenos Aires después de un viaje a la Patagonia Argentina y decirle a Vicky: “probé esta birra increíble que solo se conseguía allá”. Casi me mata. Cómo no la compre? Ella ahora no la iba a poder probar. Y estamos hablando del 2019. Imaginate mucho tiempo atrás.
Hablar de cultura cervecera como si nos refiriéramos a la ciudad perdida de Atlantis es una perdida de tiempo.
Te doy un minuto para pensarlo: que sentido tienen todos los últimos titulares que leíste de “la cultura cervecera es…”?
A ver, que estoy segura que en todos mis textos aparece pero estoy invitándome a mi misma y en este caso a vos persona loca que decide leerme a que repensarme este SIN SENTIDO.
Si anhelamos la cultura cervecera es porque no sabemos que es. La cultura existe y esta cada vez mas movilizada y fusionada entre si. La cerveza existe y desde 1900 no hay razón para que no llegue a cada rincón del mundo de una forma distinta o de la misma que antes. La cultura tiene cerveza.
Tu cultura, de tu ciudad tiene una cerveza. Sabes cual es? O anhelas la cerveza de una era pasada y hablas de ella con nostalgia? Apoyas a la cervecera local que es parte de tu cultura actual?
Hace años cuando buscaron mejorar la tecnología para hacer más litros de esa cerveza que se vendía bien se partían la cabeza pensando en cómo hacerla llegar a buen puerto, o bien al puerto (cuac). Y ahora que tenemos todas las posibilidades de conocer, amar y beber cerveza SUPER FRESCA en todas las culturas… lo que hacemos es hablar de Atlantis? Hablar de algo como si estuviera perdido?
Llegar a una ciudad y visitarla y comer con un local es increíble porque estamos disfrutando eso que es de ahí. Cuando vos estas en tu ciudad, bebes “lo de ahí”? Lo conoces? Es una pregunta tan simple que es difícil. Conoces, probaste y seguís la evolución de la cerveza de tu lugar?
El otro día un personaje me dice: “esta cerveza fresca de (completa con cualquier país europeo alejado de España)”. Y le digo, “pero te pidieron algo local y le diste eso?” “bueno… es de acá”, me responde.
Claro, si no somos capaces de diferenciar que es acá con allá estamos al horno con papitas. Así mi ciela, no vamos a poder defender la cerveza. Porque la cerveza no es de una cultura del más allá ni de los planetas retrógrados de la punta de la lora encima de un poste.
La cerveza que tenés donde estas: es la cerveza de tu cultura. Y a esa hay que defender.
Un pibe con el que compartí un rato hablando de como ayudarnos entre todos me dijo algo genial: “se llenan la boca con cultura cervecera, pero no se hablan entre sí”.
Preocupate por hablar, interactuar con gente de tu cultura. Y si es con una cerveza en la mano, que sea con la espuma necesaria y fresca, de tu ciudad.
Gracia cerveza. Gracias.